El manipulador

*Impresiones de la película El autor

Dirigida por Martín Cuenca e interpretada por Javier Gutiérrez 

   Conozco a más de uno así. Martín Cuenca hilvana la historia sobre un perdedor que se toma la justicia por su mano.  Una historia dinámica, entretenida y jocosa. Quizá poco original. Sólo faltaba Tosar husmeando debajo de la cama. O Darth Vader aliándose con Carmen Maura por llevarse el botín. Como horizonte El Móvil de Cercas y como decorado La Giralda.

   Un trabajo para lucimiento de Javier Gutiérrez. Que, con los sudores del Guadalquivir, hasta aparece en cueros. Parece que el viejo del Mar y la Fiesta se inspiraba así. Más sencillo diseñar una obra si todos los personajes giran en una noria alrededor del principal.

   A Álvaro se le pone la vida cuesta arriba. Tiene motivos para estar resentido.Lo apartan de su trabajo en la notaría por bajo rendimiento. Su mujer le traiciona y además la vida le sonríe. La venganza,el aguijón,no se la quiere clavar a través del hijo.El arma del crimen será la literatura.

   Su profesor de escritura creativa es engreído, crudo y exigente.  Con una metodología agresiva. Mete el dedo en la llaga para suscitar la emotividad. Le incita a que sienta, ame, viva… Siempre dispuesto a aconsejar si le ponen un mantel limpio y una buena botella de vino.

   Cambia de apartamento. No gasta un duro en muebles.Es zurdo pero sin creatividad. Escribe en el teclado solo con los índices.La realidad es ser más poderosa que la ficción.Todos hemos  escuchado a un vecino más o menos de lo que hubiéramos querido. Encuentra su guión en el patio de luces. La ventana indiscreta. Un teatro chinesco.Le suma una innata habilidad para ganarse su confianza y malmeter en sus debilidades. Elabora un estadillo con sus rutinas. Es solitario y sombrío. Reprimido no sé. Con esa malicia que todos tenemos escondida en algún lado.

   La primera que sucumbe a su ambición es la portera. Un personaje redondo. Con decoración del hogar de dudoso gusto.El Crucifijo es un pantocrátor que todo lo ve.Busca lo que su marido no le da.El problema es que se encapricha de él. Y ya sabemos lo traicioneros que son los celos.

  Al Señor Montero le hacen compañía los animales disecados.Se lo gana por medio del ajedrez. Aunque Álvaro, como yo, parece víctima fácil de un jaque pastor.  Consigue que el militar se sienta a gusto confesándole sus ideales políticos. “La democracia destruye la dignidad y el pensamiento”.  Ha amasado una buena fortuna. Todos sus ahorros descansan en una caja fuerte pero su combinación no es secreta. Piensa que un arma es defensa suficiente.

   Los inmigrantes atraviesan problemas económicos. Finge ser abogado para ayudarlos cuando solo busca su desgracia. Eso es más dramático. Tiene más chicha.Además él arrastra problemas con la bebida.  Los mexicanos primero recelan pero acaban confiándole todas sus miserias.

  

 Ya tiene su Colmena.Aquí se acota mucho más el número de vecinos.¿Se descubrirá el pastel?