*Mis impresiones de la película Julieta de Pedro Almodóvar
*Con un reparto con Enma Suárez, Adriana Ugarte, Rossy de Palma, Inma Cuesta...
In media res.A Pedro
le gusta empezar en mitad de la tormenta.Para dejarnos desorientados como una
gamela en medio del temporal. Rasca en el perdón, el paso del tiempo, la soledad.
Julieta se entrega
a la mitología. Conoce a su Poseidón en un tren. Una cerilla de pasión. Traqueteo.
Mientras, un hombre con la maleta vacía de ilusión se suicida en las vías.
Muere la mujer de Xoán
que estaba en estado vegetativo. Se
anima a pedirle a Julieta que venga a Galicia a vivir con él. Ya no había
obstáculos para este amor. Salvo Marian, una criada cotilla y chapada a la
antigua. Y tal vez Aba, una amiga
especial que crea esculturas fálicas.
Nace Antía, también
apasionada del salitre. Papá, con alma íntima de farero, permanecerá para
siempre en el océano. Y Julieta cae en una profunda depresión. Zombi. Ida. Su hija y Bea, mejor amiga de la niña,
cuidarán de ella en sus peores días. Sin un reproche.
Pero la paloma
agita las alas. Necesita volar en libertad.Ya es mayor de edad. Marcha a un retiro
espiritual de tres meses a los Pirineos.
La necesidad y dependencia de Julieta se agiganta. Y la joven decide que
lo mejor es desaparecer. Casi sin dejar rastro. Firme como una fanática.
Mientras la mamá de
Julieta se va de este mundo. También estaba muy deteriorada. También su hombre
necesitaba explorar el cariño de su asistenta. Pero Julieta no digiere bien a su hermanastro.
Y es fría como un témpano con papá.
Dilema moral para el espectador.
Abatida otra vez. Cada
cumpleaños de Antía es un puñal al corazón. Ni una carta de su puño, ni un mail,
ni un whatsapp. Conoce a Lorenzo casi por casualidad. Porque él la buscó. Un amor de madurez. Le persigue como un “personaje
obsesivo de Patricia Highstmith”. Ya Grandinetti tuviera un rol semejante en Inevitable. Pero Julieta tiene más pena por el ayer que ilusión
por lo que vendrá.
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