domingo, 1 de mayo de 2016

Destellos del Medievo

Escépticos en el pub Compostela
Pub Airas Nunes (29-4-2016)

   La historiadora Antonia de Oñate se presentó en el Airas Nunes gracias al bote recaudado por los Escépticos en el pub. Lo primero que le interesó fue la Guerra Civil por “un elemento personal muy fuerte”. Hoy viene a convencernos de que la Edad Media no fue un “pozo de barbarie”. Es necesario coger un poco de perspectiva ante los tópicos. Ingmar Bergman hace una alegoría de la Peste Negra en El Sétimo Sello mediante una partida de ajedrez con la muerte.  
 
 
   “La historia es un todo continuo que no se puede trocear”. Las distintas edades que hemos estudiado en la escuela se dividen en función a sucesos políticos que acaecen en Europa, salvo el caso de Mesopotamia, que sigue estando bastante al oeste.  La historia no es una mera acumulación de datos sino un método de análisis para analizar el pasado y proyectar mejor el futuro.  Es habitual y erróneo que los historiadores aludan a transiciones para referirse a períodos más oscuros de los que no tienen documentación.

   Muy recomendable es Europa ante el espejo de Josep Fontana pues sólo nos hemos preocupado de otras culturas cuando interferían con la nuestra.  Observando los recovecos de nuestro ombligo. Nuestro minúsculo continente nunca tuvo en cuenta las estepas hasta que el peligro acechaba.   Se sabe poco de la Australia anterior a la llegada de los europeos porque no había documentos escritos. José Alcina Franch fue un antropólogo que estudió la América precolombina. Los símbolos que aparecieron allá son incluso menos reconocibles para nosotros que los japoneses.  

   En las universidades andaluzas, fundamentalmente la de Granada, fue donde mejor se estudió Al-Andalus porque se fomentó el estudio del árabe. Por alguna razón hoy “comemos berenjenas, cultivamos azafrán y jugamos al ajedrez”.

   El Imperio más extenso de la historia no fue el inglés, que llegó a la India, ni siquiera el español. El romano apenas alcanza los 6´5 millones de K2. Fue el Imperio Mongol fundado por Gen-gis Kan que en el siglo XIII dominaban desde el Pacífico al Mar Negro, casi 35 millones de Km2.

   En la Edad Antigua también hubo oscurantismo. Es común que mucha gente hable de mundo grecoromano y fueron dos culturas bien diferenciadas. Se basaba mucho en el mercado de esclavos, como se aprecia por ejemplo en Rodas.  En las Médulas miles de hombres perdieron la vida extrayendo oro para los romanos.    Por sus calzadas entraban primero los soldados “dando medicina” antes de que apareciesen los comerciantes. No es cierto que cuando se acaba la Pax Romana se muere el comercio en occidente.  Por ejemplo ya existía una fábrica de papel en Xátiva.

   Entre los inventos de la Edad Media están los molinos de viento y los hidráulicos, el arado de vertedera, fundamental para suelos húmedos, la herradura y la collera para los caballos.

   Ibn Jaldún fue un viajero andalusí del siglo XIV que recorrió el mundo islámico. Miraba la historia con un sentido crítico, más incluso que Herodoto.  

   Antes de la expulsión de los judíos y la conversión de los musulmanes se sabe que la convivencia entre las tres religiones no fue siempre pacífica. Hubo ciertas fricciones. “Los alfaquíes hablaban mal de los cristianos por beber vino“.  Para los Reyes Católicos la religión es poder. Consiguen el poder de representación por el que podían elegir a tres “de su cuerda” para que luego el Pontífice decidiese entre ellos.  

   Colón, de tradición portuguesa y genovesa, era un hombre de negocios que quería instaurar factorías en América. Isabel, en cambio, sólo quería el control territorial. Los castellanos que cruzaban el Atlántico querían ser señores en otro sitio ya que en su tierra no tenían ese privilegio. 


  El Malleus Maleficarum, tratado sobre la caza de brujas, y el Acto de Fe presidido por Santo Domingo de Guzmán, cuadro de Pedro Berruguete, son de finales del XV, es decir en los albores de la Edad Moderna. Pero la más cruda Inquisición se corresponde con la Época Renacentista.

   De la Edad Contemporánea es de todos conocida la mancha del nazismo. En plena II Guerra Mundial Jean Renoir tuvo el coraje de filmar Esta tierra es mía sobre la ocupación alemana en Francia. Algo debe de pintar la historia pues todos los regímenes totalitarios lo primero que hacen al llegar al poder es intentar manipularla.



 

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