viernes, 10 de marzo de 2023

Las palabras

*Presentación de Alma, nostalgia, armonía y otros relatos sobre las palabras

de Soledad Puértolas y Elena Cianca en la Librería Numax (27-II-2023)

Con Suso de Toro de cicerone

   Es un ensayo ameno, con cierto tono filosófico pero no para especialistas.  Mucha gente piensa que solo hay el diccionario de la Real Academia. Está el de María Moliner y otros muchos.  "No queremos la definición. No hablamos de un modo lingüístico." Y les daba miedo hacer afirmaciones rotundas. Eso es arriesgado. Soledad le pedía información a Elena Cianca de cada palabra. Ese era el modus operandi. Fue un arduo trabajo. "Estoy animada porque ya no lo voy a volver a hacer" reconoce Puértolas. El nombre del primer capítulo, "Qué personaje es esta? ", deriva de una pregunta que le hizo su nieta de cuatro años cuando leían un cuento juntas.

 

   La obra se basa en autores españoles"y muchos sudamericanos".Vargas Llosa es el Galdós de nuestro tiempo. Sus personajes siempre sufren un cambio físico o emocional.  "Casi siempre hablamos de escritores muertos para que no nos puedan replicar salvo Llosa o Poniatowska".  Así son los casos de Sánchez Ferlosio, García Márquez, Aldecoa, Carmen Laforet, Onetti, Borges, Carmen Martín Gaite...  Suso de Toro extrañó "a Luis Martín Santos y a Juan Benet". Menéndez Pelayo es una figura singular, lleno de anécdotas. Era conservador pero confeccionó el diccionario de heterodoxos y disidentes.

 

"El lenguaje es como un ser vivo".Hay palabras que van creciendo y suman acepciones.También pasa lo contrario. Una de las que vertebra todo el libro es persona. Desde Fray Bartolomé de las Casas.  Al principio se refería a gente importante, nobles y religiosos. "La Celestina es una obra destructiva, nihilista y desesperada"; ese personaje de Rojas y todos los criados tienen protagonismo y son tratados como personas. Seguramente Galdós es quien más la utiliza. Casi siempre se refiere a una persona buena y honrada. Por ejemplo "Zumalacárregui era buena persona aunque extremadamente cruel en la guerra". Es decir el Garbancero Nacional, que era progresista y anticlerical, lo ve como algo moral.


   En el título subrayan tres vocablos, nostalgia, alma y armonía. Nostalgia es una palabra bastante reciente. En Francia le llaman mal de país. Cianca recuerda que ahora es conocida como duelo migratorio o síndrome de Ulises. Los mercenarios suizos de final del XVIII se ponían a morir. Y entonces se consideraba una enfermedad de médicos. "Ahora ya no puedes ir por la Seguridad Social". Emilia Pardo Bazán tiene textos en castellano sobre la morriña.  Cuando Suso de Toro investigó sobre la familia Baltar estudió un caso de unos enfermos en un hospital de sangre durante la Guerra Civil. No daban curado. Eran gallegos. El doctor percibió que se debía a una inadaptación.

 

   Alma ahora está desprestigiada. Se asociaba a espíritu,algo inmaterial. Tiene menos sentido religioso del que parece. Alma de cántaro es algo vacío. Armonía, que en gallego se escribe con h,es el final feliz del cuento. Pero sorprende según el contexto. En El Quijote se emplea como ruido desagradable.

 

   Fantasía, imaginación o curiosidad fueron palabras muy censuradas. Curiosidad es "deseo de saber algo que no se debe". El peso de la religión y del catolicismo es enorme."Las monjas eran dinamita".  Fantástico es positivo pero fantasioso ya no.  Imaginación mejoró su imagen desde mayo del 68.

 


   Misterio es una palabra preciosa. Se ha desacralizado. Baroja la emplea muchísimo. Es que toda la Generación del 98, Unamuno o Azorín, son referentes constantes.

 

   Quedó fuera solidaridad, "que pensamos que podía ser el comienzo". Tampoco entraron individualismo, ser humano, castigo, hombre o mujer. Suso de Toro echa de menos el término novela.  "Peregrino si tiene un lado negativo por algo será, es un acicate" bromea Puértolas. Socorro es una palabra que ya denota auxilio y ya lleva el tono cuando se pronuncia.

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