Desintoxicar nuestro organismo

*Conferencia de la Doctora Homeópata Pilar Gómez
en El Corte Inglés de Santiago de Compostela

   Hemos de nutrirnos de alimentos cargados con la energía del sol. Los trucos de la abuela no iban desencaminados. Nos dejaban un día sin comer, una lavativa y aceite de ricino. 

   Hay cuatro elementos de color blanco muy dañinos. Son la harina refinada, la leche, el azúcar y la sal. Los alimentos refinados, más baratos, proliferaron tras la II Guerra. El estrés también nos intoxica.“Hay que parar los caballos”y estar en paz con nosotros mismos.

   La causa de muchas enfermedades es la deshidratación. Nuestro cuerpo tiene al menos un setenta por cien de agua pero cuando nos hacemos mayores bajamos al cincuenta. El agua alcalina e ionizada es la ideal. Es sabrosa y aporta calcio, magnesio y potasio. Una botella de cristal parece estar libre de fenoles.El agua ácida que separa la máquina valdría para lavar granos o heridas.El problema de las fuentes es que el agua porta los gases de los coches y de la industria, así como restos de metales pesados y de orines de personas y animales. Y la del grifo tiene cloro.

   La doctora Kousmine estudió el cáncer con ratones traídos del Instituto Curie. Los alimentó con lo que aportaba el huerto y con agua del pozo; a veces un poco de pan blanco. Los niveles de cáncer disminuyeron drásticamente. Luego, se puso a trabajar con personas y su éxito se basaba en cuatro premisas. Buena alimentación. Control del PH; nuestro cuerpo es ligeramente alcalino y debe evitar la acidez. Ingerir suplementos nutricionales y grasas saludables como omega3, omega6 y omega9, el del aceite de oliva. Y limpieza intestinal con agua.

   Todos los días eliminamos toxinas a través de la orina, las heces o el sudor. Las mujeres también por la lactancia y la regla.Los cuatro grandes filtros son el pulmón, el riñón, la piel y el tándem hígado-intestino. Cuando ingerimos toxinas en la pared intestinal se generan costras, casi un pozo negro. También van para allí los restos de medicación.Para controlar el tránsito exacto de tu intestino puedes comer remolacha, eso sí sin beber vino tinto para no confundirse.

   La hidroterapia de colon se basa en la introducción de agua a nivel rectal; así se drena el sistema linfático pero no llega al intestino delgado. De este método ya se hablaba en la mítica obra americana, El Tao de la salud, el sexo y la larga vida. Los supositorios son del pasado. 

   “No hay que tenerle miedo”al enema de café. El agua solo lleva a la apolla rectal. Elimina toxinas pero provoca irritación en la vesícula. También se puede efectuar con tomillo o romero.

   Se dice que el mal carácter se expresa en el hígado.Es un órgano con gran poder de regeneración. La naturópata Andrea Esmorís habló de la limpieza de este filtro.El tratamiento se basa en seis días bebiendo zumo de manzana y al séptimo aceite de primera presión en frío y zumo de pomelo rojo. Tras visitar el wc de forma asidua puedes eliminar piedras e incluso bajar peso.

   Un tratamiento ideal para sanar una gripe son los baños con sal sin refinar. Así es factible ir a trabajar “si queréis”.Serían unos veinte minutos a alta temperatura. Acabas realmente cansado. Solo está contraindicado para pacientes con varices o mujeres con la menstruación.