(Fotografías tomadas del Blog
"Lo que yo te digo")
Medianoche. Hora de
aquelarre. La luna está gordita. Ayer fue azul. Cielo añil. Gafas de sol protegen
del brillo de las estrellas. “Nos harán seres mágicos y ardientes”. Ribeira, poco enérgica, pero muy fiel. Vaquerizo
actúa en Cambados. La Nancy Anoréxica ya ha fluido con la
banda.
Bien empastados los
instrumentos.Batería secuenciada en los teclados de Fermín Villaescusa. Lució
Mario Cea, de estética heavy y dedos prodigiosos; sus cuerdas fueron acústicas
para llorar por los falsos amigos en Donde
estabais. El bajo de Luis Bolín
suena muy oscuro.
Treinta años de
travesía. Se dice pronto. Un tren de largo recorrido. Vértigo.El tiempo pasa y
no perdona. Nostalgia de la infancia. ¡Qué dura se ha vuelto la vida después! Cansado
de vivir eternamente. Trabajo duro de sol a sol. Si un día he de morir
que sea allí donde nací.
Rafa se comunica
por susurros. Un chamán. El mago de Siam. “Tu chica no te dice las mismas cosas, ni te pone los mismos ojitos; de
masajes en los pies ni hablamos”. Mi mente se nubló. Cuando el amor se envenena
es mejor hacer maletas y decir adiós. Tu voz, la huella que quedó.
Aunque sin amor voy a enloquecer. Es triste
vivir con un caparazón para evitar que nadie más te hiera. “No puedes dejar que
el discurso del miedo te deje anclado en el sofá”.
Alegato en defensa
de la piel. El jardín de las delicias. Cabalgando en la pasión. Su pelvis baila
sensual, provocadora. “No me digas esta noche que te duele la cabeza”. Me gusta
verte sola en la oscuridad pese a que“mi
mami no quiere verme con mujeres como tú”.Quiero más y más.
El último viaje fue
a Sildavia. Un mundo mágico de árboles desnudos, girasoles y mariposas. Resuenan
los graves en mi caja torácica. Tras cien minutos y dieciocho temas se apagaron
los focos. El bala perdida hiciera
una invitación. A seguir con la mala vida en su camerino.
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