martes, 24 de diciembre de 2013

El Tourmalet

Etapa reina de los Pirineos del Tour 2012

Nibali prometiera dar trabajo a Sky. El Tourmalet genera respeto y Aspin dio pereza; Añoro a los agitadores de los noventa. Chiapucci, Pantani, Chava o Brotchard hubiesen jugado un solitario aunque luego les cayese una pájara de veinte minutos. Seguro. Pero en esta edición Andy sigue con tiritas en la pelvis, Contador castigado por el chuletón y Valverde fuera de forma. Y ahora un vampiro sediento vació la sangre de Frank. El líder del Liquigas era la única alternativa; reservó su órdago a las últimas rampas del Peyresourde. Ivan Basso había tensado la cuerda. Cris Froome arrastró a su líder a rueda del campeón de la Vuelta 2010. El keniata ya se cansa de seguir directrices de equipo habiendo demostrado tanto arrojo como su líder. Se ofrece jefe de filas, valía y sacrificio demostradas para arriba y en las cronos. Ya tenemos la foto del podium en los Elíseos.

La emoción estaba en la lucha por la etapa. Thomas Voeckler se zampó primero a Feillu y luego no dejó albergar esperanzas a un Sorensen demasiado acostumbrado a agridulces. Un filón para la realización. Un bufón no exento de talento que nos distrajo jugueteando con la lengua y apartando a espectadores alborotadores; mientras, subía puertos a pecho descubierto y sin descansar sobre el sillín. Compartió su gozo con el coche de Europcar y ya no tenía más parafernalia en su repertorio para la foto de meta. Tras una maratoniana jornada al sol le brotaron lunares rojos. El año pasado defendió el amarillo, mañana hará horas extra para que Kessiakoff no sume mucho en las cinco cotas.

Gorka Izaguire, puro espectáculo, volvió a coger otra escapada. En su segundo Tour el corredor del Euskadi nunca se cebó con los cambios de ritmo; como guinda le arrebató el bronce a Vinoukorov, ilustre Matusalén del Tour, quien se trastabilló con el pedal.

Evans, desinflado sin que mediaran chinchetas, supo agradecer el trabajo incondicional de Hincapie. La carretera pone a cada uno en su lugar y ya se apuesta si, desmotivado, conseguirá defender el que sería su sexto top ten en la ronda gala. A conformarnos pues con la buena estrella de Luisle y la quinta plaza del siempre agazapado Haimar Zubeldia.

No hay comentarios:

Publicar un comentario