viernes, 26 de octubre de 2018

El pirata prendido


*Iván Ferreiro acude al ciclo Pulso de la SGAE de Compostela
(23-X-2018, 21 horas)

   Sólo le quitamos las vendas de los ojos para mirar al pasado.Las esposas para acariciar el piano. Y los grilletes de los tobillos y la bola de plomo cuando desveló sus secretos.   

“A los tres días al cole ya me parecía aburrido. Soy creativo. Mi hermano y yo teníamos en casa unas porterías que no estaban justo una frente a la otra”. Hoy hubiera tenido tentación de ser youtuber.

      “Acataba las normas pero no me parecía que estaban bien. Parecía que si no ibas a la Universidad ibas a ser un mierdas”. Empezó cuatro carreras y no acabó ninguna.Probó en matemáticas,después se apuntó en historia“que tiene una biblioteca muy bonita”.Luego en Vigo hizo biología y su mamá quiso que se matriculase en derecho por la UNED. “Amaro, el pobre ,acabó esa carrera. Las madres son muy manipuladoras”. A los 17 le permitió ser músico pero bajo coacciones: ver menos a los colegas, ir al conservatorio…

   Siempre concibió la música como un juego. Pulse la tecla play. “Veía el violín como un instrumento infernal.  Tocaba fatal, tenía letras raras y una voz extraña”.

   Lo normal era escuchar la música en el salón todos juntos; “conseguí llevarme el tocadiscos a mi habitación.Es algo muy íntimo”.  “La sociedad nos castra bastante. Los andaluces no es que canten mejor sino que cantan en familia y no les avergüenza”.

  “Me encantan las grabadoras.Hice así Oh Nena,que la odio pero fue la primera canción que pude acabar. Prefiero grabar a hacer canciones. Amaba mis maquetas. Aunque eran una mierda eran mías”. Al principio las letras le daban igual,sólo pensaba en la melodía. 

   Desgrana su proceso creativo. “Cada vez soy menos perfeccionista pero me divierto más. Si piensas en el público no te dejas llevar. Así nunca vas a contentar a nadie”.
               *Concierto íntimo de Los Piratas en la Sala Casting (Araguaney) en 1999

   “Lo más importante es creérselo uno aunque a los demás no le guste.Que no te dé vergüenza. Es una heroicidad. Cuando acabamos Ultrasónica mis amigos, ya con pisos alquilados y coche en propiedad, me dijeron que no podía sacar eso. No tenía autoridad para hablarle de mis emociones”. Gustaba más fuera de su círculo.  Habla sobre la decepción y el desencanto.  El corte Filofobia, “me encanta la palabra”, procede de un disco que le regalaron que se inspiró en un pasaje de Los Simpsons.


   Cuando se trabaja en grupo hay que seguir la misma dirección. Todos aportan cosas. “No necesitas imponer tus ideas, eso es de gente insegura. Leiva es un compositor espectacular”.  El proceso creativo de Santi Balmes le aterroriza. “Es brillante”; sabía que el disco se llamaría El poeta Halley y no tenía ni una frase.“Yo construyo desde el texto”. Con uno de los que más ha gozado trabajando es con Fon Román; de una apuesta con él surgió El equilibrio es imposible. Ahora tiene mono de escuchar a León Benavente.
   En el alma gallega está la cabezonería. Se le notaba a Siniestro,Golpes Bajos…No les influía lo que dijese Paloma Chamorro.“No estábamos en el meollo,éramos los galos”. Tienen ese espíritu Novedades Carminha o Xoel.Los Piratas tampoco seguían modas.

 Están en Warner desde 1992.Al principio les apretaban mucho.Cambiaban los dueños y ellos seguían allí.“Cuando cayó la industria yo seguía vendiendo lo mismo. Era la ladilla gallega”.“Ahora hasta nos exigen que hagamos lo que nos dé la gana” opina Amaro.

   “Estamos mejor ahora que cuando La Ser y Los 40 lo dominaban todo. Se cargaron el pop de los 90 con grupos de mierda”.

   Asume varios momentos de crisis creativa. Cuando hizo Promesas que no valen nada. También cuando la banda se descompuso; “apretaban tanto en letras y melodías que no se me ocurría nada”.  Y luego se quedó otra vez en blanco por problemas personales.

    *Jornada de rodaje del anuncio de Mahou en Santiago (abril, 2015)

   No hay que estar amargado para componer, hay que estar feliz. “Me acostaría con David Lynch”. Una vez vino a Madrid y dijo que era una tontería que un artista estuviera toda la vida atormentado. Y Almodóvar no lo entendía. “Mis canciones más tristes las he escrito supercontento. Me tomo el trabajo a coña.Toda canción necesita una puerta trasera. Me gusta escribir más de ideas que de personas.  Que si luego la toco dentro de tres años no me afecte”. Prefiere que las canciones tengan múltiples puntos de vista y pone por ejemplo Espectáculo.“Si me deja la novia intento no escuchar canciones tristes y si tengo un familiar enfermo trato de no ver películas sobre pacientes terminales”.

   Los domingos cuando regresa de los festivales no es el mejor momento para que aprecie una canción. “Necesito que alguien me emocione a mí: un libro, una película…”   Le impactó El Manantial, película de mitad del siglo XX protagonizada por Gary Cooper. Habla de un arquitecto que hace edificios modernos. Si no le gusta el proyecto prefiere picar piedra. Llega hasta volar un edificio.

   “La gente joven necesita desfogar. Por eso es necesario incluso que se salten la raya y tengan rebeldía. Yo al principio pecaba con la sexualidad. Luego pensé en decir cosas interesantes que no significaban nada. Ya me sé el truco si lo hacen otros ahora”. Lo mejor es que la gente piensa que se dirigen a ella directamente.   

   Preparó una canción sobre el Rey. “¡Hay que cargar la mano! A los músicos tienen que dejarnos en paz. A lo mejor es el momento de irse a la cárcel.  Hay que tratar de no ofender.  Valtònyc no me ofende, se ofende a sí mismo con las barbaridades que dice”.

   “Mi trabajo es mentir. Despistaros y que entendáis otra cosa. Voy encriptando todo. No quiero que se sepa mi vida. Me aburre hablar de mí. No sé como soy. La comunicación es torpe y distorsionada”. “En mis canciones quiero ser una mujer, un homosexual, un extraterrestre.   El mayor censor ahora se llama Twitter”.

   Compuso la letra de Solaris en una furgoneta pero luego se dio cuenta de que no le daba tiempo a respirar.  Habla sobre la comunicación.

   Le encargaron la banda sonora de Fariña y buscó lo más atávico. La intención de Iván era repetir en bucle la frase "O que teño que facer para non ter que ir ao mar".

   “Cuando me va bien lo que hago es arruinarme comprando cosas electrónicas que me gustan”. Ahora quiere divertirse con el Colectivo Mugatu. “Martí Perarnau quiere ser Dj, Amaro solo hacer unas voces y yo tocar unos botoncitos”. 

   Se sienta al piano.Bajo petición popular toca Farsante. “Leiva llegó a su casa con un estribillo de un tema que iba a ser para Raphael. Al principio me obsesionaba pensando si parecía un pastiche”. Se anima con Bueno, averno de Egon Soda.  “Ellos no la tocan”. Le cuesta encontrar a la tecla. A la tercera sale. Y los móviles de los fieles recogieron testimonio audiovisual en la sede de la SGAE. Los milennials no usan boli bic.

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